Las mujeres en Navarra disponen de menos tiempo libre que los hombres entre semana, 43 minutos menos, y en fin de semana, 65 minutos menos. Además, tareas como la ‘preparación de comidas’ o ‘cuidado de la ropa’, son realizadas mayoritariamente por las mujeres. La mayoría de la población cree que la situación de las mujeres es peor que la de los hombres.
Así lo recoge la Encuesta Social y de Condiciones de Vida 2020 publicada este lunes por el Instituto de Estadística de Navarra (Nastat), que indica que el nivel de desigualdad o brecha de género existente entre hombres y mujeres se manifiesta de diferentes maneras que generalmente afectan negativamente a la realidad material de las mujeres. Algunas de estas diferencias van desde los salarios al reparto de las tareas domésticas.
Los resultados de 2020 reflejan que en todas las tareas domésticas la dedicación de las mujeres es mayor a la de los hombres y, en particular, las tareas de ‘cuidado de la ropa’, ‘preparación de comidas’ y ‘limpieza del hogar’ son las que más diferencias registran.
Frecuencia con la que se realizan determinadas tareas domésticas por sexo (%) ‘Recoger la mesa’ es la tarea que presenta mayor nivel de equidad con un 38% de hombres que dicen recogerla ‘siempre’ frente a un 41,6% de mujeres, seguida de la ‘compra de alimentos’, tarea que dicen hacer ‘siempre’ un 32,5% de los hombres frente a un 43,1% de mujeres.
Las actividades más laboriosas presentan cifras más desequilibradas. La tarea de ‘cuidado de la ropa’ arroja la mayor diferencia entre sexos con un 52,7% de mujeres que ‘siempre’ se ocupa frente a un 19,8% de hombres que declaran lo mismo. Después, con menor diferencia está la ‘preparación de comidas’, que ‘siempre’ hacen un 22,6% de hombres frente a un 48,4% de mujeres.
Respecto al esfuerzo que supone compaginar las tareas domésticas con el trabajo, el 58% de los hombres que trabajan señalan que no les supone ningún esfuerzo o muy poco. En el caso de las mujeres, son un 49% las que hacen esta valoración.
Con el cuidado de menores las diferencias aumentan, al 46% de hombres que trabajan y se ocupan en alguna medida del cuidado de menores les supone ningún o poco esfuerzo cuidarles. En mujeres, las cifras son diferentes, un 71% afirma suponerles bastante o mucho esfuerzo cuidar de los menores.
Por último, en los cuidados a personas dependientes los hombres que trabajan y se ocupan en alguna medida de personas dependientes dicen en un 64% que les supone poco o ningún esfuerzo, mientras que las mujeres que afirman esta situación son el 51%.
TIEMPO LIBRE
Comparando los resultados de las horas libres disponibles para ocio en días laborables y de fin de semana en los años 2016 y 2020, la encuesta señala que ha aumentado el tiempo libre en días del fin de semana y entre semana, pero en los dos años registrados las mujeres disponen de menos tiempo que los hombres entre semana y en fin de semana, y las diferencias aumentan en el último año.
Según se añade, en la mayoría de los casos las horas disponibles para mujeres y hombres aumentan de 2016 a 2020. Las mujeres aumentan más su tiempo disponible, sobre todo entre semana. En el caso de los hombres, reducen su tiempo libre en los fines de semana del año 2020 y mantienen los niveles de 2016 entre semana, pero siguen teniendo más tiempo libre que las mujeres en todos los casos.
VALORACIÓN DE LA SITUACIÓN DE LAS MUJERES
Tanto en la población general como en hombres o mujeres, hay una mayoría que piensa que la situación de las mujeres no es de total igualdad respecto a los hombres. Respecto al año 2016, en 2020 aumenta 12,3 puntos el porcentaje de hombres que creen que las mujeres tienen una situación de total igualdad respecto a los hombres, en mujeres esos mismos porcentajes descienden prácticamente un punto.
Sin embargo, la encuesta también recoge la percepción de la población sobre si la situación de las mujeres en los salarios, el empleo o el acceso a la vida política, entre otros aspectos, es ‘igual’, ‘mejor’ o ‘peor’ que la de los hombres.
Los resultados de 2020 reflejan que globalmente se percibe una situación desfavorable o peor para las mujeres, algo similar a los resultados de 2016. Aunque va reduciéndose la distancia, disminuye el porcentaje de quienes creen que la situación es peor y aumenta el de quienes consideran la situación equitativa o incluso mejor para las mujeres.
Las variaciones más relevantes de 2016 a 2020 se producen en la estabilidad laboral y el acceso a cargos políticos. Bajan 10 puntos porcentuales quienes creen que la situación de las mujeres es peor en lo que se refiere a estabilidad laboral y 11 puntos quienes creen que la situación de las mujeres es peor para el acceso a cargos políticos.
Por último, la población vuelve a considerar que en el acceso a la educación es donde hay mayor igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres, con un porcentaje en torno al 90%. Y, por el contrario, es en los salarios y los ascensos laborales donde mayores porcentajes de la población (70% y 67% respectivamente) creen que la situación de las mujeres es peor que la de los hombres.
