El Gobierno de Navarra no valorará el euskera en los concursos-oposición de acceso y traslado en la Función Pública que estén situados en la zona no vascófona. Una parte muy pequeña en el conjunto de puestos de la Administración foral, pero de gran valor simbólico. Finalmente, y tras más de dos años de debate interno dentro del Gobierno, el PSN ha hecho valer su criterio y ha evitado que el euskera se puntúe como mérito en la Ribera.
Sí se tendrá en cuenta en las convocatorias que tengan como destino alguna localidad de la zona vascófona, así como algunos puestos de la zona mixta. La lista de las plazas afectadas es la misma con alguna excepción de la recogida en el decreto de 2009, que no fue cuestionada por los tribunales. Y se incluyen además todos los puestos del Servicio-Navarro de Salud-Osasunbidea de la zona mixta.
Este es un aspecto importante porque la gran mayoría de plazas que salen a concurso-oposición son las de sanitarios, y aproximadamente el 80% están situadas en Pamplona y su comarca. En todas ellas se tendrá en cuenta a partir de ahora el euskera, corrigiendo así la excepcionalidad de los últimos meses y que ha tenido reflejo, por ejemplo, en la próxima OPE de enfermería, donde no se valorará el conocimiento de una de las dos lenguas propias de Navarra.
No se ven afectadas por el decreto las oposiciones ordinarias (las que son solo por examen, sin baremación) ni las del profesorado, que cuentan con su propio proceso de selección vinculado a las materias y modelos lingüísticos diferentes.
Un trámite administrativo de seis meses
El consejero Javier Remírez ha presentado a los sindicatos presentes en la Mesa General los términos del decreto, desbloqueando una situación que estaba generando una clara discriminación del euskera en las convocatorias públicas que se venían realizando en los últimos meses. Las centrales tienen ahora 15 días para presentar alegaciones y, si los plazos ordinarios se cumplen, el nuevo decreto entrará en vigor el próximo verano.
La nueva normativa corrige así el limbo jurídico que había creado la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Navarra, que había anulado la valoración del euskera en la zona mixta y la zona no vascófona por ser general y no específica para las necesidades concretas de cada puesto. Con la nueva redacción, se clarifica ese aspecto también para las lenguas comunitarias (inglés, francés y alemán), que se valorarán “cuando guarden relación con el contenido del puesto”.
No hay por ahora una redacción de esos puestos, como sí ocurre con el euskera, por lo que será en cada proceso selectivo cuando deberá determinar si el idioma extranjero se puede meritar. Podrá hacerlo sin discriminación territorial con un máximo de dos puntos sobre los 46 máximo de valoración. No es así en el caso del euskera, condicionado por la zonificación lingüística que dictamina la Ley del Euskera.
De esta forma, y sobre 46 puntos máximos, el euskera se podrá valorar con hasta 4,6 puntos en la zona vascófona y hasta 2,76 puntos en la zona mixta. En caso de que la escala de puntuación alcance los 100 puntos en determinados procesos selectivos, los idiomas oficiales de la UE contarán 5 puntos y el euskera con 11,5 en la zona vascófona y con 6,9 en la mixta. Esta misma proporción se mantiene para los concursos de ascenso de categoría.
Los porcentajes aplicados ahora para la zona vascófona y mixta son similares a los que recogían los artículos anulados por el TSJN (11% y 7% respectivamente), aunque en el decreto de 2017 esa cifra se podía incrementar hasta el 23% y el 14% para determinados puestos, y era general para todas las plazas y no solo para las señaladas. En cualquier caso, la puntuación es superior a la recogidas en el decreto de 2009 del Gobierno de UPN, que baremaba el euskera con un 6% y un 3% en las zonas vascófona y mixta, frente al 5% de las lenguas extranjeras.
Todas las plazas de Osasunbidea en la zona mixta
El nuevo decreto habilita el reconocimiento del euskera como mérito en todos los puestos del SNS-Osasunbidea de la zona mixta. Salvo aquellos que se sean dictaminados como bilingües, donde el euskera sí será preceptivo, la puntuación será del 11% en la zona vascófona y del 7% en la mixta sobre el baremo de méritos (40% de la fase de concurso). La cifra será ligeramente inferior (10% y 6%) cuando los méritos supongan el 20% de la fase del concurso, frente al 80% de la antigüedad en la Administración.
La normativa detalla además en qué puestos concretos de la zona mixta se podrá valorar el euskera. Se citan 14 profesiones distintas, como administrativos, conserjes, bomberos, periodistas o policías forales. Será de 2,76 puntos sobre 46 de mérito. En el caso concreto de la Policía Foral, el decreto especifica que la baremación será de 6 puntos para las lenguas extranjeras, de 11,1 para el euskera en la zona vascófona y de 6,66 en la mixta sobre un total de 100.
No obstante, la lista se podrá ampliar en el futuro en base a los plantes lingüísticos que el Gobierno tiene previsto aprobar los próximos meses, y en los que se debe detallar de forma mucho más concreta qué plazas tienen requisito bilingüe –actualmente solo el 3% de todas las plazas de la Administración lo son– y en cuáles se puede considerar mérito el conocimiento de idiomas.
Un trabajo que queda pendiente en el seno del Gobierno, que pese a que muchos de los planes lingüísticos están ya finalizados, sigue sin darles luz verde. Pero que son fundamentales –más que el decreto presentado ayer– para garantizar la atención al público en euskera. Y que se debe completar también con el nuevo Plan Estratégico del Euskera, elaborado por Euskarabidea pero pendiente de aprobación en el Consejo de Gobierno.